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Actualizado el 31 de Diciembre de 1969


Secretos de Vida: PALABRAS QUE HIEREN


La palabra es la que une a los seres humanos, se vive en un mundo de palabras, donde debemos comprender que lo que anhelamos obtener es saber utilizar la mediación de la palabra.

En el lenguaje se debe tener cuidado con el tono de voz que se emplea y la forma de expresar lo que se quiere decir, ya que una misma frase puede ser interpretada de diferentes maneras.

El interlocutor puede captar la dulzura, cariño, deseo de ser aceptado o percibir mandatos de ira o ansias de dominio u obediencia.

Palabras dulces / Respuestas justas.

Autoritarismo erróneo / Rebeldía caprichosa.

A veces las personas ofenden sin el criterio de la magnitud que significan palabras, frases dichas, quizás sin mala intención, pero el interlocutor lo toma como tal.

Hay charlas donde alguien te expresa un “algo” y te hiere, lastima y detiene, produciendo una desvalorización bajando tu autoestima.

Vamos a analizar juntos una frase pronunciada que puede dañar al interlocutor:

“NO ERES CAPAZ DE LOGRAR HACER ALGO”

Al escuchar ese concepto, la persona entra en una incógnita, preguntándose: ¿Lo dijo para amargarme o soy incapaz de lograr ese “algo”?

Al empezar la frase con una negación, determina que es una orden, seguro de lo que dice, descalificando y desvalorizando al otro, porque no puede asegurar con firmeza su propia opinión y no está capacitado para adelantarse al hecho si es capaz o no.

La otra persona se siente incapacitada para dar un paso adelante, su autoestima bajó al primer nivel, provocándole un dolor intenso que puede marcarla como un ser fracasado en su intento de hacer “algo”.

Hay hechos, vivencias, palabras, que aunque se escuchen en la niñez, nunca se olvidan, porque quedan en el inconsciente y fluyen en cualquier acto de la vida inhibiendo a la persona, frustrando a cada momento el objetivo, plan o meta que desea realizar.

En la última parte de la frase dice: “Hacer algo”… No se refirió específicamente a una causa, sino que globalizó en la palabra “algo” un todo.

Se debe tener cuidado en el vocabulario que se emplea al dirigirse, ya sea un niño, joven o adulto, porque siempre quedan almacenadas marcando una llaga que lo acompañará toda la vida.

“NO ERES CAPAZ”…

No dejes nunca que nadie te denigre, responde con un silencio y demuestra tu capacidad de hacer ese “algo” por ti mismo, demostrando que puedes lograr lo que tú anhelas llegar.

Nadie puede ni debe indicarte lo que eres capaz o no de hacer, sólo que las personas nocivas gozan con el hecho de descalificar al otro, ya sea por envidia o venganzas ocultas, sin admitir el profundo dolor que involucra la ofensa.

Hay dos formas de reaccionar: “El temeroso” renuncia a su proyecto y “El luchador” desea demostrar su capacidad para conseguir ese “algo”.

Todas las personas, deben conservar el deseo de luchar, de seguir adelante, de conseguir el efecto de la causa que originó su objetivo.

No permitas que nadie te ultraje, te humille, te hiera, porque todo ser humano, sin excepción, por el mero hecho de serlo, es digno del respeto incondicional de los demás y de sí mismo; merece estimarse y que se le estime.

La vida está formada por “causas y efectos”.

Si la causa es hacer algo, el efecto será haberlo hecho.

Si la causa es escuchar al que ofende, el efecto será lo que escuchaste.

Si la causa es ser indiferente al que ofende, el efecto será tu deseo de ser diferente.

¿QUÉ SIGNIFICA RESPETO?

Es el reconocimiento del valor, los derechos innatos de los individuos y de la sociedad, saber admirar y valorizar a los demás para lograr ser respetado.

En la medida que exista el poder de la humildad, se habrá conseguido conocer la palabra RESPETO.

Hay sujetos a quienes les agrada impresionar, dominar o limitar la libertad de las personas, imponiendo sus ideas u opiniones, de esa forma pretenden, con su autoritarismo, ganar respeto, sin advertir que es el método más rápido para perderlo.

Hay otros que anteponen la parte material, agrediendo con palabras hirientes, malos gestos, prepotencia, soberbia, a los que ven con un nivel social o económico más bajo.

A esas personas, yo les diría un proverbio chino: “A veces un mendigo es más sabio que un Rey”.

El respeto va unido a dos palabras: Tolerancia y Educación.

TOLERANCIA

Es la que permite aceptar al distinto de nosotros, en su forma de pensar y actuar, admitiendo que, a veces, podemos encontrar elementos para enriquecernos.

Es falta de tolerancia cuando creemos tener siempre la razón, sin escuchar otras opiniones, creyendo ser dueño de la realidad.

Se unen dos palabras: Respeto y Tolerancia.

La tolerancia requiere poseer educación, donde se forma un trinomio: Respeto, Tolerancia y Educación, palabras muy unidas, imposibles querer o poder separarlas.

La tolerancia nace de la educación de cada persona.

EDUCACIÓN

Nace en el hogar, continúa en el colegio y el entorno de cada uno, porque es un ejercicio diario en cualquier hecho cotidiano.

La educación debe ser enriquecida con la adquisición de nuevos conocimientos y con un entorno donde se aprenda de más y no de menos.

PARA ANALIZAR…

Tener presente siempre, que no todas las personas deben pensar y actuar como uno quisiera que fuera.

Aceptar con respeto, tolerancia y educación a los demás, como son y quieran ser. Es la persona la que posee la libertad de elegir a quién y con quién estar y convivir.

Recordar siempre el valor e importancia de la palabra cuando dialogan con los demás.

Mercedes Davire

 


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